La calificadora Fitch Ratings ve varios retos para Pemex con el cambio de gobierno, los mismos que ha arrastrado desde admiraciones pasadas. Pero advierte, la onerosa carga fiscal de la petrolera es el motivo principal del deterioro de su perfil crediticio, con lo que su calificación en escala internacional podría bajar si continúa este rumbo.
Actualmente su calificación internacional es BBB+ y, sin considerar su vínculo con el gobierno federal, es calificada con B-, nota que podría descender a CCC y arrastrar su calificación a nivel global.
Lucas Aristizabal, Director Sénior, y Alberto De Los Santos, Director Asociado de Fitch Ratings, explican en su análisis que la carga fiscal de la empresa ha aumentado su deuda en cerca de 66% en cinco años. En el primer trimestre de 2018 la deuda la compañía llegó a 106 mil millones de dólares luego de cerrar el 2013 con un adeudo de 64 mil millones de dólares. Por ello, “aunque no se espera, la administración nueva debería reducir los impuestos de Pemex para que estén acordes con las prácticas internacionales de la industria”, recomendaron.
De esta forma, detallan, su Stand Alone Credit Profile (SCP), es decir, su perfil crediticio sin contemplar al gobierno federal, se podría estabilizar.
La firma advierte que la calificación internacional de la petrolera podría bajar si su SCP desciende, ya que reflejaría una estructura de capital insostenible que no será consistente con la designación “muy fuerte” que requiere para mantener su calificación actual.
Para evaluar si la nota de su SCP desciende, Fitch Ratings monitoreará el aumento del apalancamiento en deuda total a reservas probadas, que la expectativa de que el apalancamiento ajustado al flujo de gasto operativo se mantenga por arriba de ocho veces y que el flujo de caja libre siga negativo.
La calificadora también hizo énfasis en los problemas que podría traer el cambio de estrategia que la próxima administración plantea. Alertan que la modernización o expansión de las refinerías de Pemex, así como las prácticas de control de precios de combustibles líquidos podrían acelerar el debilitamiento del SCP.
De igual forma, adelantó que, aunque la reforma energética fue positiva para la empresa, ésta verá sus beneficios a muy largo plazo.
“El Gobierno Mexicano está altamente incentivado para apoyar a la compañía dadas las consecuencias sociopolíticas y financieras muy importantes que las dificultades financieras de la compañía tendrían en el país”, afirmaron.
Problemas financieros en la empresa tienen la capacidad de interrumpir el suministro de combustibles a todo el país, situación que acarrearía consecuencias sociales y económicas significativas, ya que sus problemas financieros tendrían impacto en la capacidad de recaudar financiamiento del gobierno y de otras entidades relacionadas con él.