Desde la perspectiva de Moody’s Investors Service, la petrolera nacional requiere apoyos por 20 mil millones de dólares para 2019, indicó Peter Speer, analista responsable para Pemex de la calificadora.
Explicó que bajo el análisis de la agencia, el déficit de efectivo negativo de la empresa productiva del Estado asciende 10 mil millones de dólares, monto del cual casi dos mil millones corresponden al pago de pensiones y ocho mil millones al flujo de caja negativo.
En su intervención, Speer reconoció el compromiso del gobierno actual de aliviar ese déficit con una inyección de capital y emisión de pagarés de pasivos laborales de la empresa por un monto de tres mil millones de dólares.
Sin embargo, Moody´s subraya los vencimientos de deuda próximos de Pemex, así como la inversión que debe hacer Pemex para la restitución de reservas, rubros que demandan apoyos financieros por más de 13 mil millones de dólares.
Con respecto a si la calificación del Soberano y la de Pemex están ligadas, Ariane Ortiz-Bollín, analista de éste en Moody´s indicó que si se baja la calificación de Pemex no necesariamente reduciría la calificación del soberano.
“Nosotros estamos viendo cuales son los supuestos macros del próximo presupuesto, queremos ver como cierra el año y si las perspectivas son distintas a las que estamos asumiendo (…) hace falta tiempo, más datos duros”, dijo.
Previamente en su ponencia, Ortiz-Bollín advirtió sobre la disyuntiva que tendrá que enfrentar el gobierno fiscalmente hablando.
“El gobierno va a tener que enfrentar una disyuntiva seguir haciendo recortes de gasto para mantener sus metas fiscales lo cual tiene sin duda un impacto negativo en crecimiento, o aumentar deuda y no cumplir con sus metas fiscales”, expuso.
“No es que le vayamos a bajar de nuevo la calificación por un incremento ligero en la deuda, lo que nos preocupa más bien son las tendencias a mediano plazo y el crecimiento más bajo generadas por esta incertidumbre en inversión”, sostuvo la analista.