Tres presuntos huachicoleros murieron intoxicados ayer por inhalar los gases de las gasolinas, tras una fuga de una toma clandestina descubierta en Tlalnepantla de Baz, Estado de México.
La toma clandestina se ubica en un inmueble de la calle Mitla, colonia Poder de Dios, cerca de los límites con la alcaldía Gustavo a Madero.
La fuga se salió de control y generó un derrame de gasolina proveniente de la toma ilegal al ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex); el combustible derramado llegó hasta las calles cercanas obligando a evacuar a los residentes de 60 viviendas y cerrar comercios.
Las primeras versiones apuntan a que los presuntos huachicoleros se encontraban llenando bidones cuando se zafó la manguera de la toma clandestina derramando la gasolina; los huachicoleros cayeron desmayados por los gases tóxicos y después perdieron la vida.
Expertos de Pemex acudieron al lugar para cerrar la válvula, mientras que personal de Protección Civil y los bomberos aplicaron espuma y tezontle para contener el derrame de combustible.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México inició las investigaciones, mientras que el Servicio Médico Forense realizó el levantamiento de los cadáveres.
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