El huachicol sigue siendo un dolor de cabeza para el sector gasolinero a pesar de las iniciativas implementadas en este sexenio, por lo que se necesitan endurecer todavía más las medidas para reducir este delito, considera Giovanni Valdez, gerente de cumplimiento regulatorio de Servifácil.
“El huachicol nos ha impactado muchísimo, nosotros tenemos contratos de credito y débito con clientes transportistas con base en un cierto precio, y de repente no entendemos por qué una estación de gasolina a dos o tres kilómetros vende el litro a uno o dos pesos más barato”, afirma el directivo.
Dicha situación, asegura, no tiene una lógica económica cuando en este negocio el margen es mínimo.
“Hasta dan ganas de irles a comprar la gasolina porque están por debajo de nuestros costos”, bromea Giovanni sin dejar de subrayar el impacto que les provoca, ya que, por ese diferencial de precios, los consumidores se van siempre por la opción que les represente más ahorro, abunda.
“Yo he notado que en algunas estaciones el costo llega a ser de un peso o de un peso con cincuenta centavos por litro menor al resto del mercado”, añade Valdez.
Datos de PEMEX revelan que las pérdidas por huachicol suman 48.5 mil millones de pesos entre 2019 y el tercer trimestre de 2023. Este monto supera el quebranto de 39.4 mil millones de pesos registrados en 2018, el último año del sexenio a cargo de Enrique Peña Nieto.
El asalto a los ductos de Pemex suma 34.7 mil barriles por día en promedio, lo que significa que entre enero de 2019 y el 30 de septiembre de 2023 las bandas del crimen organizado robaron más de 60 millones de barriles de combustible.
“Resolver este problema es algo complejo porque son muchas aristas; se requieren mejoras regulatorias, mayor cumplimiento de obligaciones. Es un tema que tiene que estar de la mano de otras acciones”, afirma el vocero de Servifácil.
Desde su visión, se debe endurecer la inspección y vigilancia del mercado al tiempo de impulsar mecanismos que incentiven a las empresas a que cumplan la normativa y endurecer los castigos a las personas que ejerzan estas acciones.
“Son muchas las actividades que en una sincronía deben de suceder para llegar a un escenario ideal donde el huachicol no exista”, señala.
Huachicol fiscal
Por otro lado, considera que el huachicol fiscal también implica una forma de competencia desleal y causa distorsiones en el mercado, pues algunos importadores no pagan los impuestos aduanales que marca la Ley al momento de internar los combustibles al país.
“Vemos con buenos ojos el decreto presidencial que pretende desincentivar estas prácticas y pensamos que el resto de la industria que opera en apego a la Ley también lo considera una buena medida”, afirma.
El decreto impone restricciones a la importación de ciertos combustibles, pues señala que el 80 por ciento de las gasolinas y otros hidrocarburos han sido adulterados para internarlos en las aduanas sin pagar los impuestos correspondientes.
Delincuencia Por otro lado, el directivo de Servifácil comenta que a nivel general la empresa no ha visto afectadas sus operaciones por la injerencia del crimen organizado, pero reconoció que sí existen localidades en donde la delincuencia complica sus actividades.
“Nos afecta porque tenemos que accionar brigadas de respuesta inmediata de atención a estaciones de servicio que han sufrido percances, atención jurídica emergente, entonces son gastos que la empresa asume y que tenemos controlados pero que sí nos impactan”, afirma.
Detalla que algunas de las estaciones de Servifácil, sobre todo las que operan en lugares con elevada delincuencia, tienen que tomar medidas como tener el menor flujo de efectivo disponible en el lugar, a fin de disminuir los riesgos de pérdidas.
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