Para la Asociación Mexicana de Proveedores de Estaciones de Servicio (AMPES), la industria gasolinera está reviviendo luego de afrontar una contingencia sanitaria que derivó en una suspensión de plazos y términos legales en la Comisión Reguladora de Energía (CRE), y en consecuencia, en un rezago considerable en la solicitud de permisos para nuevas estaciones de servicio, comercialización, distribución o almacenamiento de petrolíferos.
Como consejero de la Asociación y como empresario, Mauricio Boué, reconoce que solicitudes han tenido que esperar dos años para resolverse, sin embargo, a partir del mes de septiembre de 2022 se notó una aceleración en el proceso de resolución por parte del órgano regulador, es decir, la CRE.
“Aparentemente los entes regulatorios están haciendo las cosas un poquito más rápido. De hecho, vamos mejor que hace dos años que no salía nada. Esperemos que las cosas sigan fluyendo y funcionando”, revela en entrevista con Energy21.
Dentro de sus principios AMPES tiene el objetivo de fomentar la relación entre asociaciones similares, cámaras y confederaciones industriales y comerciales, al tiempo de ser el portavoz de los asociados ante autoridades, organismos o instituciones dentro y fuera del sector energético.
A su vez promueve la cooperación entre sus asociados en la realización de programas de asesoría, desarrollo y capacitación.
“Lo más importante para nosotros es que logremos hacer que el sector energético nos volteé a ver y vea en nosotros el referente técnico del mercado de estaciones”, señala su presidente Mario Zamudio.
La comunicación, asesoría y acompañamiento también son prioridad para la AMPES, más si se considera lo cambiante que es la regulación en este sector, añade Isis Castañeda, secretario de consejo.
“El reto es la…
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