Durante la primera quincena de enero los precios de las tarifas eléctricas y de la gasolina Magna complicaron la cuesta de enero para las familias mexicanas, con aumentos de 0.90 por ciento y 0.64 por ciento, respectivamente.
De acuerdo con datos del INEGI, se trata de los dos productos de la canasta energética que más aumentos registraron durante los primeros quince días del año; la gasolina de bajo octanaje rompió una racha de caídas de precios desde la primera quincena de noviembre, mientras que la electricidad mantuvo su tendencia al alza.
La gasolina de alto octanaje o Premium subió 0.43 por ciento y también rompió con la tendencia de dos quincenas previas en las que había registrado disminución de precios.
A su vez, el gas LP redujo su costo en 0.06 por ciento pero este comportamiento a la baja fue más moderado frente a la caída de 4.64 por ciento que registró durante la segunda quincena de diciembre.
En general la canasta de servicios y productos energéticos tuvo un alza de 0.54 por ciento a tasa quincenal, lo que implicó un repunte desde el nivel de 0.39 por ciento registrado en el mismo periodo de tiempo del año pasado.
“El incremento de los precios de los energéticos en la primera quincena del año estuvo en línea con lo esperado. La electricidad subió 0.90 por ciento quincenal y 7.35 por ciento anual, cerca de lo que ya se había dado a conocer por la CFE”, señala un análisis de Grupo Financiero Base.
Por otro lado, la inflación general de la primera quincena de enero mostró un repunte, al ubicarse en 0.46 por ciento quincenal y 7.94 por ciento anual, su mayor nivel desde la primera quincena de noviembre del año pasado y superando las expectativas del mercado.
“Las presiones al alza para la inflación se concentraron en el componente subyacente de servicios y en los precios de productos agropecuarios”, destaca el análisis.
Continúan las presiones al alza sobre la inflación general, siendo las más preocupantes las originadas en el componente subyacente de mercancías, en donde parece ser que los agentes económicos están ajustando precios al comienzo del año ante la expectativa de que la inflación general seguirá elevada, destaca.
“Hacia el cierre del año se mantiene sin cambios la expectativa de inflación en 5.1 por ciento”, añade Grupo Financiero Base.
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