El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) prevé un déficit recaudatorio de hasta 208 mil millones de pesos si el Gobierno federal continúa con su política de estímulos fiscales al IEPS aplicable a los combustibles a lo largo de 2023.
Estimó que el próximo año, la administración podría sufrir pérdidas millonarias por concepto de IEPS considerando un precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo de 68.7 dólares por barril fijado por Hacienda en los Criterios Generales de Política Económica 2023.
“De acuerdo con este análisis, se estima que se dejarían de recaudar 71.9 mil millones de pesos en el escenario bajo, 140.2 mil millones de pesos en el medio y 208.6 mil millones de pesos en el alto”, subrayó el IMCO.
De acuerdo con el Instituto, las pérdidas fiscales proyectadas equivalen a un monto similar al presupuestado en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2023 para la Secretaría de Salud por 209.6 mil millones de pesos, o incluso, más del doble del proyecto de presupuesto para la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana 99 mil millones de pesos.
“Esta política tendrá implicaciones fiscales negativas al reducir los recursos para financiar programas y proyectos en áreas prioritarias como salud, seguridad, educación, entre otras”, advirtió el IMCO.
Desde su óptica, el Gobierno federal podría incorporar el costo de oportunidad de los recursos no recaudados en su análisis sobre la política de estímulos fiscales, así como sus costos medioambientales y de salud pública.
“Solo así se podrá valorar el costo en bienestar social que estos estímulos representan para la sociedad mexicana”, añadió en un comunicado.
Como propuesta, el IMCO insta a las autoridades a evaluar las implicaciones negativas de los estímulos al IEPS y provea información oportuna sobre los estímulos a dicho impuesto.
Asimismo, pide focalizar los apoyos fiscales al diésel para reducir la regresividad de los estímulos y al mismo tiempo que se mitiga el alza en el combustible responsable de transportar los bienes por carretera.
“La implementación de estímulos de esta naturaleza ha tenido y tendrá, en caso de continuar a lo largo de todo el siguiente ejercicio fiscal, un elevado costo de oportunidad al reducir la bolsa de recursos disponible para financiar programas y proyectos de distinta naturaleza”, concluyó el centro de investigación.
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