La economista en jefe de Banco Base, Gabriela Siller Pagaza, señaló que existe una altísima probabilidad de que la siguiente administración mantenga el estímulo a las gasolinas, a pesar de que representa 0.58% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Siller Pagaza advirtió que el retiro del estímulo fiscal a las gasolinas llevaría a una inflación general por encima del 6% al iniciar 2019, lo que originaría una respuesta monetaria del Banco de México (Banxico) más agresiva de lo esperado.
“Si no se llega a renovar el estímulo fiscal, en enero se daría un nuevo gasolinazo, con un alza de alrededor de 10% o de aproximadamente dos pesos. Esto obligaría al Banxico a subir la tasa de interés en 25 o 50 puntos base el primer trimestre para bajar la inflación”, explicó.
Durante la presentación ante medios de comunicación de las expectativas económicas del banco, la economista indicó que el incremento propuesto por el próximo gobierno de 14% al salario mínimo también podría ser otro elemento de presión sobre la inflación general, que incidirá sobre las futuras decisiones de política monetaria del banco central.
La expiración del estímulo fiscal a las gasolinas, el alza del salario mínimo y, de materializarse, el aumento del tipo de cambio hasta niveles de 19.30 pesos por dólar, serían determinantes para que Banxico llegara a actuar de forma más agresiva con una tasa de referencia que podría llegar a un nivel de 10%.
“Viendo la afectación que tendría sobre la inflación el retiro del estímulo y en el poder adquisitivo de la población, existe una altísima probabilidad de que lo dejen, a pesar de que representa 0.58% del Producto Interno Bruto (PIB)”, afirmó.
Con información de Notimex
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