A lo largo del sexenio de Enrique Peña Nieto, la inversión dirigida a Petróleos Mexicanos (Pemex) y otros indicadores del desempeño del sector petrolero, revelan que su expansión se frenó en los últimos seis años, como apuntan las cifras dadas a conocer en el Sexto Informe de Gobierno del Presidente Peña Nieto.
El documento señala que entre 2013 y 2018 la inversión pública impulsada en la industria petrolera de Pemex alcanzó 1.69 billones de pesos, monto que, en términos reales, enmarca una caída en la inversión hacia el sector de 8.4%, comparada con la realizada durante la administración anterior.
El Informe de Gobierno reporta asimismo que la red de ductos en operación en el país, alcanza al mes de junio de 2018 una longitud de 29 mil 648 kilómetros, 24.2% menos que en 2012, siendo los gasoductos los más afectados en este sistema.
La red de gasoductos de Pemex se compone actualmente de ocho mil 993 kilómetros, lo que representa un recorte de 48.1% respecto a su operación en 2012. De igual forma, los poliductos y ductos petroquímicos registran bajas de 12 y 14%, respectivamente, con redes de ductos de ocho mil 378 kilómetros y mil 775 kilómetros, en cada caso.
Aunque, vale señalar que las caídas en estos valores resultan inferiores a las observadas en la administración precedente.
En este sexenio, sólo la red de oleoductos logró una expansión de 2.8% hasta llegar 10 mil 502 kilómetros de ductos en operación.
Por otra parte, la capacidad instalada de la petrolera continuó descendiendo. En el caso de la capacidad de refinación instalada, ésta asciende a mil 627 miles de barriles diarios, 3.7% menos que en el sexenio anterior. Para el sector petroquímico se alcanza una capacidad instalada de 21 mil 891 miles de toneladas por año, 13.5% inferior que en 2012.
Al descenso en la capacidad instalada de la industria, se suma que su índice de utilización también se redujo.
La capacidad instalada de refinación fue en promedio de 59.1% durante el mandato de Enrique Peña, destacando como la capacidad de planta utilizada más baja al menos desde el sexenio de Ernesto Zedillo. No obstante, para la petroquímica, la capacidad de planta utilizada aumentó, ya que fue en promedio de 65.8%, la más alta desde el sexenio de 1995 al año 2000.