México se encuentra a diez puntos de alcanzar su meta de 35% de generación de energía eléctrica de fuentes limpias para 2024 y actualmente se encuentra en el top ten de países donde es atractivo invertir en la materia según diversos rankings mundiales, por lo que el almacenamiento cobra mayor importancia.
“En la medida en que va creciendo la participación de las energía limpias y renovables en el país, se presenta también la necesidad de mayor capacidad tecnológica de almacenamiento para aprovechar esos recursos y los excedentes”, afirmó un vocero de Siemens.
En la actualidad, México genera 25% de su energía eléctrica con fuentes limpias, de las que cerca del 16% corresponde a fuentes renovables. Según el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, la capacidad de generación limpia se ha cuadruplicado en el actual sexenio y la inversiones han colocado proyectos verdes en más de la mitad de las entidades del país.
Por ello, la compañía alemana ofrecerá tecnología de vanguardia global basada en baterías que almacenan dichos excedentes de energía, señaló Alejandro Preinfalk, Vicepresidente para Siemens México y Centroamérica de las Divisiones de Energy Management, Mobility y Building Technologies.
Destacó que a nivel global se espera que el sector de almacenamiento de energía conectado a la red se expanda de una capacidad instalada total de hasta 28GW para el año 2022, equivalente a la potencia utilizada por 18.6 millones de hogares.
La multinacional ofrecerá servicios y tecnología de almacenamiento de energía basado en baterías a través de Fluence, una nueva compañía global que integró en 2017 junto con AES.
“A Fluence lo respaldan 48 proyectos globales que conforman un total de 463MW de almacenamiento de energía a través de baterías en trece países, incluyendo el mayor proyecto de almacenamiento de energía basado en batería de litio-ion cerca de San Diego, California”, resaltó en un comunicado.
Dicho comunicado destaca también que la compañía ofrecerá soluciones de almacenamiento de energía basadas en baterías con una escala de utilidad para una capacidad de pico flexible, servicios auxiliares como regulación de frecuencia, fiabilidad de transmisión, distribución y aplicaciones de integración renovable que datan de una década.
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